Mamá te nos has ido de la forma más injusta y más inesperada, te nos has ido cuando más falta nos hacías, te has ido ayudando, haciendo lo que mejor sabías hacer, ayudar y proteger como siempre.
Te nos has ido de lo terrenal, y aunque nunca más sentiré tus abrazos tan reconfortantes y que en ocasiones tanto necesitaba, sé que estarás a nuestro lado siempre.
No me imagino vivir una vida sin ti, sin mi madre a mi lado, nos quedaban muchos momentos por disfrutar juntas, y ahora, la ilusión de mis nuevos proyectos se ha nublado... pero conseguiré tener conversaciones contigo cada día y a todas horas, te lo prometo, y entonces resurgirá esa ilusión... Además dicen que una persona nunca se va si la siguen recordando, y nosotros jamás te olvidaremos.
Seguro que estás viendo a toda la gente que te quería, tienes todo lleno de flores que tanto te gustaban, y no me extraña mamá.
No había nadie como tú, eras el pilar de nuestras vidas ahora nos hemos quedado solos, sin ti, pero seguirás siéndolo mamá. Guíame y enséñame a sacar a papá, al tate y a tus nietas y a los abuelos adelante. Te prometo que voy a intentar ser como tú, aunque me has dejado el listón muy alto.
Nunca te enfadabas con nadie, los rencores no existían en tu vida. Siempre protegiendo y preocupándote por tantos, haciendo lo posible para que los demás fueran felices dejando a un lado tu bienestar personal.
Mamá, tu niña se ha salvado gracias a ti y va a salir adelante y la cuidaremos como tú lo hacías.
Tranquila que no dejaré a papá, a mi hermano y a tus nietas solas. Ahora soy yo quien te va a relevar.
Ha sido todo un orgullo tenerte como madre, dicen que me parezco a ti y en mis rasgos físicos la familia te va a seguir viendo.
Mamá te quiero y nunca dejaré de hacerlo.
María del Pilar Mancera Carrascosa